miércoles, 27 de octubre de 2010

He recuperado casi media vida.



No se porque me entran ganas de escribir ahora que escucho una versión del Stabat Mater  interpretado por Arvo Pärt
He recuperado casi media vida.
Recuerdo las palabras de mi sicólogo cuando me dijo después de sicoanalizarme que mi vida desaparecía a una edad y desde aquel día no había nada significativo; solamente el nacimiento de mis hijas, Cristina e Irene, y la vuelta a casa de mis padres.
Después de unos meses me he dado cuenta que efectivamente mi vida, parece, vuelve a ser lo que era en aquel entonces. He recuperado mis paseos al caer la tarde por el entorno de la Catedral de Zamora, por el Castillo y por las calles olvidadas donde se escribió y se desarrolló nuestra historia.
Mi historia, mi vida, esta ligada a ese entorno y me sucede como a mi buen amigo "Miguel"; que ahora lo apodo: Miguel el de Huelva (que cosas tiene la vida). Necesito inundarme de piedras con historia.
Paseo solo pero no en soledad, medito solo pero no en soledad, me ilusiono solo pero no en soledad, imagino y construyo solo pero no en soledad. Saludo a conocidos y amigos, solo, pero no en soledad.
He vuelto ha descubrir que la vida aun me puede sonreír.
Quizás mi romanticismo me lleve a pasear a esas horas y por esos sitios.
Quizás por eso, por mi romanticismo, escucho ahora lo que escucho.
Seguro, estoy seguro, que algunas cosas quiero hacerlas solo porque de esa manera me encuentro mas cerca de mi vida.
He vuelto a empezar a escribir mi historia .... ..... 

No hay comentarios: